
Escrito en MÉXICO el
El gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, negó que el homicidio de las menores de edad Leydi y Alexa ocurriera en el fuego cruzado en un enfrentamiento armado, pero dijo que el caso debe ser indagado para que se dé con los responsables.
En conferencia de prensa, el mandatario dijo ambas niñas fueron un «resultado de víctimas colaterales» ante la ola de violencia que vive Sinaloa, donde grupos armados se enfrentan con civiles.
«En el caso lamentable, muy lamentable, de la muerte de Leydi y Alexa, quienes vivían su primera infancia, (…) lo voy a decir, aunque yo no soy investigador, no fue que haya sido derivado de un fuego cruzado, finalmente estuvieron en el lugar equivocado», dijo a la prensa.
Ante los presuntos responsables del homicidio mencionó que «hay que investigarlo bien, hay que tenerlo claro porque para que haya justicia necesita haber una investigación ordenada, rápida, pronta, expedita y con el rigor debido».
Comentó también que la carpeta de investigación se encuentra en proceso para que, cuando hayan concluido los informes, el caso pueda ser judicializado y pueda haber una orden de aprehensión contra los presuntos responsables.
«No habrá impunidad» agregó.
La tragedia ocurrió pasado 6 de mayo, cuando elementos de seguridad federal y la Fiscalía General de Justicia del Estado fueron emboscados por un grupo de sujetos armados en la comunidad de El Naranjo; los efectivos del Ejército mexicano respondieron a la agresión.
La familia de Leydi y Alexa viajaban por la zona y quedó atrapada en medio de la refriega. Las dos niñas perdieron la vida al ser alcanzadas por las balas, mientras que un menor de 12 años identificado como Gael y sus padres, Saúl y Anabel, resultaron con heridas graves.