
Escrito en MÉXICO el
En medio de fuertes medidas de seguridad se llevan a cabo los funerales de Ximena Guzmán Cuevas y José Muñoz Vega, funcionarios del gobierno de la Ciudad de México asesinados la mañana de este martes en la calzada de Tlalpan.
Desde las cinco de la tarde que el Servicio Médico Forense (SEMEFO) entregó los cuerpos a los familiares, el gobierno de la capital dispuso realizar la velación de manera conjunta en Gayosso Sullivan, Colonia San Rafael, alcaldía Cuauhtémoc.
La jefa de gobierno de la Ciudad de México, Clara Brugada Molina, llegó a la funeraria después de las 9:00 de la noche para acompañar a la familias de ambos servidores públicos.
La funcionaria llegó acompañada de la consejera Jurídica de la Presidencia, Ernestina Godoy, y la presidenta de la Mesa Directiva del Congreso capitalino, Martha Ávila, detrás de ellas, siguieron algunos integrantes de su equipo de la jefatura, incluida la coordinadora de Comunicación Social, Ana María Lomelí.
Sin dar declaraciones a la prensa, la morenista entró al lugar con una rosa blanca en la mano.
Afuera, decenas de personas pedían a gritos “¡Justicia!”, “No estás sola!” y “Ni perdón ni olvido, castigo para los asesinos!”
La única funcionaria que se detuvo a dar declaraciones fue la presidenta del Congreso de la capital del país, Marta Ávila quien llamó “seguir y a cerrar filas”.
“Esto es algo cuando nuestra jefa de gobierno ha hecho grandes avances en estrategia de seguridad y Ximena y Pepe era funcionarios que siempre participaban en el gabinete de seguridad”, dijo.
En este punto se han dado cita todos los servidores públicos del gobierno de la capital del país, sin embargo nadie ha querido dar más declaraciones.
Por lo pronto el lugar está resguardado por elementos de la secretaría de seguridad ciudadana de la Ciudad de México, y elementos de la Guardia Nacional (GN) quienes discretamente se encuentran a la vuelta de los velatorios.