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El juicio por la muerte del astro de fútbol Diego Maradona en 2020 fue declarado nulo el jueves en medio de un escándalo en Argentina, lo que implica que el proceso a siete miembros del equipo médico acusados de homicidio deberá volver a foja cero, dijeron abogados involucrados en el caso.
El escándalo en el juicio se desató tras conocerse un presunto documental no autorizado basado en la jueza Julieta Makintach, una de las tres integrantes del tribunal, que la mostraba en los pasillos del juzgado y en su despacho, violando la prohibición de registros ajenos a las cámaras de la justicia.
La decisión de anular el juicio iniciado el 11 de marzo implica sortear un nuevo tribunal y realizar otro proceso, pero no estaba claro cuándo podría comenzar. Mientras abogados estimaban que podría ser este año, otros lo veían improbable.
Maradona, considerado uno de los mejores jugadores de todos los tiempos, murió el 25 de noviembre de 2020 a los 60 años por una insuficiencia y paro cardíaco «en una situación de desamparo», según la investigación de los fiscales que caratularon la causa como «homicidio con dolo eventual».
El astro arrastraba diversos problemas de salud, tenía un historial de adicciones y se había sometido a una cirugía craneal semanas antes de su muerte, una noticia que conmocionó a Argentina, donde el fútbol se palpita en cada esquina.
¿Qué pasó en el juicio de Diego Maradona?
Los jueces Maxiliano Savarino y Verónica Di Tommaso, que integraban el tribunal junto a Makintach, tomaron la decisión de anular el juicio por considerar que su colega no intervino de forma imparcial, provocando un perjuicio tanto para las partes acusadoras como para las defensas.
Los videos iban a ser parte de un supuesto documental enfocado en Makintach, titulado «Justicia Divina», en referencia a que muchos simpatizantes llamaban «Dios» a Maradona.
«Estamos de cara a un nuevo juicio que espero que se formalice lo antes posible», dijo Fernando Burlando, abogado de Dalma y Gianinna Maradona, hijas del astro, en la puerta del tribunal de San Isidro, en las afueras de Buenos Aires, que estaba atestado de periodistas y cámaras de televisión.
«Tengo fe en que antes de fin de año podamos tener sentencia. Factiblemente cada una de las partes puede ser que fije algún cambio en la estrategia», agregó Burlando.
Más de 190 testigos, incluyendo a los hijos del jugador, su exesposa Claudia Villafañe, peritos, médicos, periodistas y amigos habían comenzado a declarar en el juicio de alto perfil, que ya se había aplazado en varias oportunidades.
«Tengo angustia, tristeza, hay que seguir adelante», dijo Verónica Ojeda, expareja de Maradona.
Los acusados habían rechazado los cargos luego que los fiscales consideraran que el equipo médico brindó un tratamiento deficiente, imprudente y negligente que contribuyó a la muerte de Maradona. De ser encontrados culpables, podían enfrentar penas de entre ocho y 25 años de prisión.
Maradona ganó la Copa del Mundo en 1986, un campeonato en el que marcó dos goles memorables ante Inglaterra, y llevó al club italiano Nápoli a niveles sin precedentes.
«Lo único que queremos es que pueda seguir el juicio», concluyó Gianinna Maradona, conmocionada.