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El pasado 8 de marzo, se reportó el hallazgo de un trabajador muerto dentro de un horno de panadería en la sucursal de Bisquets Obregón, ubicada en la colonia Camarones, en la alcaldía Azcapotzalco, Ciudad de México.
Tras el hecho, la cadena de restaurantes informó en un comunicado que el empleado se encontraba realizando labores rutinarias de mantenimiento y limpieza del horno cuando, presuntamente y de acuerdo con información preliminar de los equipos médicos de socorro, sufrió un infarto al miocardio que lo dejó tendido en el suelo.
Tras el reporte, los equipos médicos acudieron al lugar, sin embargo sólo confirmaron el fallecimiento del trabajador.
Fuentes de la fiscalía de la Ciudad de México informaron que el hecho está siendo investigado.
“Se sigue investigando; los casos se siguen atendiendo aunque no sean mediáticos”, informaron a Latinus.
De acuerdo con el reportero Carlos Jiménez, el hijo de la víctima acusó que la empresa no brindó ningún tipo de apoyo tras el fallecimiento. Señaló que su padre era el encargado de limpiar el horno, pero no pudo contar con ayuda en el momento de su muerte, a pesar de que esa actividad debe realizarse entre dos personas.
El reportero también señaló que un informe de defunción contradice la versión inicial. Según el reporte, la persona no falleció de un infarto en el horno de la panadería, sino por un traumatismo en el tórax y abdomen.
Por su parte la cadena restaurantera precisó en el comunicado que serán las autoridades quienes determinen la causa oficial del deceso del trabajador. Además, agregó que desde que ocurrieron los hechos han estado colaborando con las autoridades para esclarecer lo sucedido.
“En cuanto contemos con más información y las autoridades lo permitan, la compartiremos de manera oportuna”, cita el comunicado emitido por el equipo de Comunicación de Bisquets Obregón.